Jesse Owens y Pocho.

Pocho Rospigliosi

8. September 3 Min. Lesezeit

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Jesse Owens y Pocho. «Jesse» Owens fue un atleta estadounidense. En los Juegos Olímpicos de Berlín 1936 ganó fama internacional al conquistar cuatro medallas de oro en las pruebas de 100 m, 200 m, salto de longitud y la carrera de relevos 4×400 m.2 En su apogeo fue reconocido como «el mejor y más reconocido atleta de la historia».Una de sus hazañas más recordadas fue la consecución de tres récords mundiales, y el igualar otra marca absoluta durante la competición de la Big Ten Conference del año 1935.

Jesse Owens largando la prueba de 200 metros aquella tarde de los Juegos Olímpicos de Berlin donde logró 4 medallas de oro y la ultimasen el salto final fue un salto largo.Jesse Owens dice que ni él se percató de cuando abandonó Hitler el Estadio.

La verdad entre Hitler y Owens

Estados Unidos mandó a los Juegos Olímpicos de Berlin en 1936 ,un equipo compuesto por 66 deportistas, entre ellos 10 de color los que la prensa del III Reich intentaba ridiculizar llamándoles “negros auxiliares“.

Entre estos negros destacaba un muchacho de apenas 20 años llamado Jesse Owens, pero sin olvidarnos de otros “negros auxiliares“ que fueron también medalla de oro, como Cornelius Johnson , en salto de altura, archichy Williians, en 400 metros, John Woodruf, en 800 metros, y en la prueba de 4 veces 100 metros relevos, la apoteosis negra, Owens, Ralph Metcalfe, Foy Draper y Frank Wykof, establecían un récord que se mantendría hasta Helsinki.

El Heroe de Berlin 1936 fue Jesse Owens , un hombre que dominó espectacularmente las pruebas de velocidad, ganado los 100 metros con 10.3, en un final muy apretado con su compatriota y correligionario Ralpf Metcalfe, que con el tiempo llegaría a ser elegido para el congreso de los Estados Unidos, y el holandés Martinus Osendarp.

En 200 metros Owens estableció un nuevo récord olímpico, fijándolo en 20-7, en la prueba de salto de longitud , gracias a la ayuda de su gran rival Luis Long (muerto años mas tarde en acción de guerra en Sicilia), Jesse Owens, con 8.06 metro fijaba un récord que se mantendría hasta la olimpiada de Roma en 1960, en que Ralpf Boston, también de color, lo superaba en 6 centímetros.

Berlin 1936,fue para Jesse Owens una gesta inolvidable. El negro auxiliar que pretendía ridiculizar la prensa Nazi, salió respon y ,cuando el presidente del comité olímpico internacional, Baillet Latour, propuso a Hitler que recibiera en su palco a los atletas alemanes, el dictador respondió “que no había mucha oportunidad de felicitarles por culpa de Owens,“ frase que haría famoso al negrito de Oakville al margen de las medallas.

Pero en rigor histórico, hay que poner fin a la leyenda de que Hitler no quizo dar la mano a Owens, o que le diera la espalda.

El propio Owens nos lo aclaraba. Se ha escrito esto, pero no es cierto. O por lo menos, yo no me enteré.

Revista OVACION.